BIDASOA Y EL VALLE DE BAZTÁN


Lesaka, Etxalar, Arantz, Igantzi y Bera forman la comarca de las Cinco Villas Navarras. Se encuentran en pequeños valles cerrados por montañas, y la última se levanta a orillas del Bidasoa. Todas poseen gran riqueza paisajística y una envidiable arquitectura popular. Bera/Vera de Bidasoa, asentada en la confluencia del Bidasoa con la regata Zia, guarda en su núcleo principal el Ayuntamiento, barroco y con curiosas pinturas en su fachada, así como la iglesia de San Esteban, de estilo gótico tardío. Su barrio más conocido es el de Alzate, toda una lección de arquitectura popular. La casona de los Baroja se encuentra en el barrio de Iztea. Desde Bera puede llegarse hasta Doneztebe-Santeesteban recorriendo la orilla izquierda del río por la caja del desaparecido tren del Bidasoa. Para llegar a Lesaka hay que seguir un trecho por la N-121-A y desviarse a la derecha por la NA-4000 que, desde el kilómetro 71,8, cruza el Bidasoa y remonta el río Onin. Lesaka se ha transformado en un notable núcleo industrial, sin perder su encanto y belleza. Hay que pasear por sus calles, contemplar las plazas y rincones, las casas señoriales de piedra y madera y admirar las torres de Minyurinea y , sobre todo, la de Zabaleta, conocida como la Casherna. Desde la iglesia de San Martín de Tours, del siglo XVI, se contempla una hermosa vista del caserío. De vuelta a la N-121-A, y pasado el kilómetro 70, de las Ventas de Etxalar parte la NA-4400, que asciende en 4 kilómetros hasta Etxalar. En esta localidad son muy conocidas sus palomeras, puestos camuflados en los que los cazadores esperan el paso de estas aves en sus vuelos transpirenaicos del otoño.

MALERREKA.- Malerreka es el nombre que reciben los valles de Santeesteban y de Basaburua Menor. Solo Sunbilla y Doneztbe/Santeesteban se asientan a orillas del Bidasoa, pero merece la pena adentrarse por las carreteras que parten de la segunda de estas villas. Volviendo de Etxalar a la N-121-A, en 22 kilómetros se llega Doneztebe/Santeesteban. Cruzando Santeesteban y el puente de la regata Ezpelura, la NA-170 atraviesa Elgorriaga y lleva a Ituren y Zubieta, de monumental caserío, y hermanadas las dos últimas por la celebración de unos bellos carnavales rurales. En Zubieta puede visitarse el antiguo molino, rehabilitado como eco museo. Unos kilómetros más adelante es posible enlazar con la NA-4040 para regresar a Doneztebe/Santeesteban, no sin antes detenerse en Urrotz, desde donde es posible acceder, en 6 kilómetros de subida, al Área Natural Recreativa de los Embalses de Leurza, un paraje singular cubierto de denso hayedo y dos pequeños embalses. Otro pueblo de interés es Donamaria, que cuenta con la bonita torre gótica de Jaureguia, cubierta con un particular cadalso o entablado de madera. 

PARQUE NATURAL DEL SEÑORÍO DE BERTIZ.- A unos 4 kilómetros de Doneztebe/Santeesteban, siguiendo por la N-121-A y después de atravesar Narbarte, aparece Oieregui. Antes del cruce al puerto de Velate se encuentra el puente sobre el Bidasoa que da acceso al Parque Natural del Señorío de Bertiz, con más de 2000 hectáreas de bosque de hayas, robles, castaños, etc. A la entrada, un recinto de unas 4 hectáreas contiene un jardín botánico de especies exóticas y diversas dependencias, entre las que destacan el palacio y el caserío de Tenientetxea, donde se ha instalado un Centro de Interpretación de la Naturaleza. Fuera del recinto se encuentran las oficinas de Turismo y un área de esparcimiento, desde donde se puede tomar un camino que lleva hasta el puente románico de un solo ojo y al palacio barroco de Reparacea.

MIRADOR DEL BAZTAN.- Saliendo de Oieregui y continuando por la N-121-A, se entra en Oronoz-Mugairi, se cruza el río Baztan y se pasa por Arraiotz, a 6 kilómetros de Oieregui, donde pueden verse dos hermosas torres góticas, la de Jauregizar y ,junto al puente, la de Zubiria. En 2 kilómetros se llega a Irurita, interesante por su plaza llena de palacios barrocos, la torre gótica de Dorrea y la iglesia parroquial, de campanil barroco. Desde Irurita, cruzando la regata Ibur, vale la pena hacer los algo más de 3 kilómetros que hay hasta el mirador de Baztán. Desde aquí, sobre el barrio de Zigaurre de Ziga e Irurita, la vista multicolor de los prados, bosques, montañas, pueblos y caseríos dispersos del valle de Baztán cambia según la hora y la época del año.

ELIZONDO.- En la N121-B, a 3 kilómetros se halla Elizondo, a orillas del río Baztán. Es la capital y centro económico y comercial del valle. Destaca la casa Consistorial, porticada y de estilo barroco, en la plaza de los Fueros, el cercano palacio de Arizkunenea, también barroco, convertido en Casa de Cultura, en la calle Jaime Urrutia y numerosos palacios y casonas solariegas por dicha calle y por la de Santiago.  Elizondo tiene cuatro barrios de caseríos. A uno de ellos, Beartzun se puede ir por la carretera de 6 kilómetros que parte frente a la plaza de los Fueros. Es un estrecho valle labrado por la regata Aozpeko que se abre en un paisaje de prados y caseríos. A un kilómetro de Elizondo por la N-121-B se encuentra Elbete, del que destaca el conjunto de la iglesia y casa parroquial y los palacios de Ascoa y Jaurola.

BAZTANGOIZA.- Esta es la  zona norte del valle. Para visitarla hay que tomar, después del kilómetro 61, un desvío a la derecha por la N-2601. La primera parada es Arizkun, con su calle de la Iglesia y una  buena muestra de arquitectura popular y de edificios monumentales barrocos: la iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles y la casa palacio de Iturraldea, de impresionante alero. Otro pueblo modelico por su arquitectura popular es Amaiur-Maia, sitio entre los kilómetros 64 y 65  y constituido por una calle de grandes casonas de los siglos XVII y XVIII, y algunos palacios como el de Arretxea y Arriada, del siglo XVI.