SIERRA DE ARACENA Y PICOS DE AROCHE

La ruta discurre por el interior del Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche, al norte de la provincia de Huelva. Aracena esta en la N-433 (Sevilla-Lisboa). Desde Huelva o Zafra puede accederse por la N-435, tomando en las inmediaciones de Jabugo la N-433 que lleva en 20 kilómetros hasta Aracena.

ARACENA.- Es el corazón que impulsa la vida en la sierra. También es el punto de partida de una ruta con numerosas paradas, donde el viajero podrá degustar el jamón de cerdo ibérico, cuya elaboración ha dado fama a la comarca. Entre sus construcciones civiles destacan las que el arquitecto Aníbal González se encargo de diseñar: el casino Arias Montano, el antiguo Ayuntamiento y el mercado de abastos. La vieja fortificación andalusí se eleva sobre el cerro de El Castillo, al igual que la iglesia prioral de Nuestra Señora del Mayor Dolor. Debajo de la fortaleza se extiende la res de pasillos y cavidades cársticas que conforman la gruta de las Maravillas. La primera referencia histórica a la cueva aparece en 1886. Se abrió al publico en 1914, lo que la convirtió en una de las primeras cavidades visitadas del mundo. En la antesala de la gruta se exhiben los fondos del Museo Geológico Minero local. El casco urbano de Aracena conserva algunas ermitas de traza medieval y estilo mudéjar, como las de San Pedro, Santa Lucia y San Roque. En la plaza Alta se encuentra la iglesia inacabada de Nuestra Señora de la Asunción. Otra iglesia, la de Santa Catalina, con una hermosa portada mudéjar, fue sinagoga hasta la expulsión de los judíos. La carretera N-433, tomando una desviación, lleva hacia el oeste al pueblo de Los Marines. Su nombre proviene de los marineros gallegos que llegaron para repoblar la villa en el siglo XIV.

FUENTEHERIDOS.- Para llegar a Fuenteheridos es preciso continuar 2 kilómetros por la N-433 y tomar una desviación. Esta es una de las poblaciones más pintorescas de la sierra. Toda su parte antigua esta considerada conjunto histórico artístico. En Fuenteheridos hay que llegarse hasta su fuente y ver el caudal que brota de sus 12 caños. Al lado, en la plaza del Coso, puede verse una de las posadas más antiguas de la zona, y en la entrada de la población, una cruz de mármol del siglo XVIII. Pero es la iglesia del Espíritu Santo su monumento más destacado. En las afueras, a un kilómetro en dirección a Portugal, están los jardines de Villa Onuba, diseñados a principios de siglo XX por el alemán Wilhem Sundheim, que planto más de 100 especies de árboles.

ALÁJAR.- Una carretera local acompañada de castaños lleva de Fuenteheridos a Alájar, centro espiritual de la comarca. El pueblo se siente bien protegido bajo la tutela de la ermita de Nuestra Señora de los Ángeles, sobre la peña de Arias Montano. Al borde de la peña se alza una blanca espadaña, junto a la cual pueden verse dos garitas del siglo XVIII.

ALMONASTER LA REAL.- Diez kilómetros separan Alájar, por la A-470, de Santa Ana la Real. Esta pequeña población de callejuelas estrechas cuenta con la singularidad del uso de dobles puertas en algunas de las fachadas de sus casas. A las afueras se levanta la ermita de San Bartolomé. Tras superar el cruce con la N-435 se llega, en 7 kilómetros, a Almonaster la Real. Declarado de interés histórico artístico desde 1982, destaca aquí el conjunto configurado por los restos de una vieja muralla árabe y romana, la fortaleza medieval y la mezquita, levantada en el siglo X sobre ruinas de edificaciones visigóticas y romanas. El entramado urbano de la población está definido por un caserío del que sobresalen viviendas de factura gótica, mudéjar y renacentista; la iglesia de San Martín, del siglo XVIII; la portada manuelina de la iglesia del Perdón, del XVI; y la Casa palacio de Don Miguel Tenorio de Castilla, del XIX. La Pinacoteca Municipal Manuel Vázquez Vargas es el museo más importante.

CORTEGANA.- Un paisaje de castaños y encinares entretiene la vista hasta llegar, continuando por la A-482, a Cortegana. El viajero se halla con un pueblo de fachadas blancas y tejados rojos, de empinadas y estrechas calles entre las que sobresalen algunas casas señoriales. El innegable sabor árabe de la población, presente en cada una de sus esquinas, se percibe también en los elementos mudéjares de sus iglesias y en la imponente traza de su castillo, elevado sobre un cerro. Formando parte de su entramado urbano se encuentra la iglesia de San Salvador, templo de estilo gótico mudéjar, levantado en el siglo XVI.

AROCHE.-  Tras alcanzar la carretera N-433, que une Sevilla con Lisboa, se dobla hacia el oeste para acercarse hasta Aroche y su majestuoso recinto amurallado del siglo XVII. A su cobijo se amparan el castillo almorávide del siglo XII, varias casas palacio, ermitas e iglesias con elementos mudéjares y singularidades como su Museo del Rosario, con más de 1500 rosarios reunidos, algunos de ellos donados por papas, reyes o futbolistas, y el Museo Arqueológico.

JABUGO.- Hay que retroceder por la misma N-433, ahora hacia el este, para llegar a Jabugo, la localidad más afamada de la sierra y emblema de una industria cuya producción se lleva a cabo en toda la comarca. El caserío de esta pequeña población, cuyo patrimonio gastronomico es más llamativo que el monumental, se estructura en torno a la plaza del Jamón, el Ayuntamiento y la iglesia de San Miguel Arcángel, obra mudéjar del siglo XVI.

LAS CUMBRES.-  Para conocer mejor estas estribaciones occidentales de sierra Morena, en los limites provinciales con Badajoz, basta con tomar la N-435 hacia Zafra hasta cruzarse con la carretera local que une las cumbres de Enmedio, San Bartolomé y  Mayores. Estas tres localidades serranas tienen su origen en una misma población romana de raíces celtas. De las tres, Cumbres Mayores presenta un patrimonio monumental más relevante, dominado por la presencia de su castillo-fortaleza del siglo XIII. Desde las Cumbres, hacia el oeste, la escapada puede llegar hasta Encinasola, casi en limite con Portugal, para prolongarse hacia el este transitando por carreteras locales. Habrá que dedicar tiempo a las fuentes y molinos de Cañaveral y Arroyomolinos de León; a las moles de granito de Cala, en la que aun se mantienen en pie restos de su vieja fortaleza árabe; el castillo de Santa Olalla de Cala, con sus 10 torres; a la plaza principal de Zufre, conjunto histórico artístico, y a los dos barrios de Higuera de la Sierra.